Las mascotas no solo nos acompañan y nos dan compañía; también pueden ser portadoras de enfermedades que afectan a los humanos, conocidas como zoonosis. Aunque la mayoría de los casos se pueden prevenir con higiene y cuidados veterinarios adecuados, es importante conocerlas para proteger la salud de toda la familia.
¿Qué es la zoonosis?
La zoonosis se define como cualquier enfermedad o infección que puede transmitirse de los animales a las personas. Esto puede ocurrir a través de:
- Contacto directo: mordeduras, arañazos o lamidos
- Contacto indirecto: objetos, jaulas, comederos o arena contaminada
- Vectores: pulgas, garrapatas o mosquitos que transportan patógenos
No todos los animales transmiten enfermedades, y muchas zoonosis son prevenibles con hábitos de higiene, vacunación y control veterinario regular.
Principales enfermedades zoonóticas que pueden transmitir las mascotas
Toxoplasmosis
- Transmisión: principalmente a través de heces de gatos infectados.
- Riesgos: puede causar problemas graves en embarazadas o personas con el sistema inmunitario debilitado.
- Prevención: limpieza diaria de la caja de arena, lavado de manos y evitar contacto con heces.
Leptospirosis
- Transmisión: contacto con orina de animales infectados, tanto domésticos como silvestres.
- Riesgos: fiebre, dolores musculares, daño renal o hepático en humanos.
- Prevención: vacunación de perros, evitar charcos de agua estancada.
Rabia
- Transmisión: mordeduras de animales infectados.
- Riesgos: enfermedad grave y casi siempre mortal si no se trata a tiempo.
- Prevención: vacunación anual de perros y gatos, evitar contacto con animales callejeros.
Dermatofitosis (tiña)
- Transmisión: contacto directo con la piel o pelo de animales infectados.
- Riesgos: provoca lesiones circulares, descamación y picor en la piel humana.
- Prevención: higiene, limpieza de camas y mantas, tratamiento rápido en mascotas infectadas.
Salmonelosis
- Transmisión: principalmente a través de reptiles, aves o roedores que portan la bacteria sin síntomas.
- Riesgos: diarrea, fiebre y malestar gastrointestinal en humanos.
- Prevención: lavado de manos tras manipular animales o limpiar sus jaulas, cocinado adecuado de alimentos para mascotas.
Cómo reducir el riesgo de zoonosis
- Higiene constante: lavado de manos después de tocar a la mascota, limpiar jaulas, comederos y areneros.
- Control veterinario regular: vacunas, desparasitaciones y revisiones periódicas.
- Evitar contacto con animales desconocidos o enfermos.
- Educación familiar: enseñar a los niños a interactuar correctamente con las mascotas.
- Medidas específicas según especie: por ejemplo, mantener la arena de gatos limpia y no manipular reptiles sin lavarse las manos.
Las zoonosis son una realidad, pero no deben ser motivo de alarma si se adoptan medidas preventivas adecuadas. La higiene, la vacunación, la desparasitación y las revisiones veterinarias son claves para disfrutar de la compañía de tu mascota sin poner en riesgo tu salud ni la de tu familia.

